Que la Fiscalía General de la República, que encabeza Alejandro Gertz, cuenta con más indicios que hacen suponer que el rancho Izaguirre, en Teuchitlán, era más un campo de entrenamiento que de exterminio del Cártel Jalisco Nueva Generación. Sin embargo, no minimiza que en dicho lugar se cometieron algunas ejecuciones, pero advierte que no se puede comparar lo encontrado ahí con casos como el de San Fernando, Tamaulipas, donde Los Zetas dejaron fosas clandestinas con decenas de cuerpos. | Se observa en “Trascendió” de Milenio.