Con ojos de plato quedaron varios legisladores en la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, incluyendo a algunos morenistas, con la presentación de la iniciativa presidencial que busca fondear con aproximadamente 12 mil millones de pesos al llamado Banco del Bienestar. Esto tomando 1.5% de los 800 mil millones de pesos que se destinan anualmente a los programas sociales y que se entregarían al Banco del Bienestar, como una comisión para la dispersión de los recursos. Nos explican que, en principio, no hay posibilidad para Morena y aliados de aprobar un periodo extraordinario para discutir y aprobar esta iniciativa y tendría que irse hasta septiembre a debate, pero ya con los nuevos legisladores. Nos hacen ver que, al final del sexenio, se dieron cuenta que la ocurrencia de crear un banco para pagar las comisiones a los privados para dispersar los fondos de los programas sociales costará a los contribuyentes 12 mil millones de pesos. Es decir, alguien se acaba de dar cuenta que poner el dinero en las manos de los beneficiarios tiene un costo, y alguien tiene que asumirlo. Así, nos dicen, la de ser un gobierno banquero se suma a otras costosas ocurrencias sexenales, que quienes pagan sus impuestos tendrán que financiar. | Se puede leer en “Bajo Reserva” de El Universal.