Manuela V. Carmona

Orizaba, Ver., 07 de marzo de 2022.- A pesar de la pandemia la explotación sexual en niños y adolescentes no se detuvo, sino que se vio un incremento en la utilización de hoteles y moteles para estos hechos, principalmente en los lugares turísticos, lamentó la asesora autorizada por la Secretaría de Turismo Federal, María Clara Martínez Mora.

Entrevistada en el municipio de Orizaba en donde acudió a dar una plática sobre el Código de Conducta Nacional para la Protección de Niñas, Niños y Adolescentes en el sector de viajes y turismo a prestadores de servicios, expuso que ningún lugar turístico por pequeño que sea, quedó exento de que en sus hoteles o moteles se violentan a infantes.

«México tiene el primer lugar de pornografía infantil y eso tiene que ver mucho con el turismo, porque es ahí donde graban los videos, donde toman las fotografías y hacen en vivos desde los hoteles o también hay hoteles que tienen centros de negocios y desde ahí se pasan las fotos e información».

Detalló que aunque en lugares como Cancún, se tiene conocimiento de que es mayor la presencia de la comisión de este delito, porque hay mucho turismo extranjero que sólo viene a eso «a efectuar actos ilícitos con las niñas y los niños», en la zona centro del Estado de Veracruz no se tiene información certera de que se estén utilizando los centros turísticos para la comisión de estos delitos, sin embargo no se duda que alguna persona hubiese cometido esta falta.

Recordó que a pesar de esta pandemia, los delitos no se detuvieron sino que continuaron y los infractores de la ley hasta buscaron nuevas formas para poderlo realizar. «Como ya no podían juntar a las personas por el COVID-19, hacían en vivos en internet que era como la nueva forma y ponían a niños, personas enfrente de una cámara para ofrecer el servicio y cobrar».

Detallo que el organismo que representa es un instrumento creado por la Secretaría de Turismo Federal, para proteger a los infantes y adolescentes de la explotación sexual y laboral situación que es bastante común, incluso más de lo pensado, aun en niños y niñas que van desde los 6 años o incluso algunos casos de menos edad.

Para finalizar celebró que las empresas se interesen en conocer este código, pues dijo que se están capacitando y adhiriendo por lo que ya tienen conocimiento del protocolo de acción el cual dice cómo se va actuar si se presenta la sospecha de cierto caso.