Se expande en la Casa Blanca y el Capitolio la sensación de que, en esta crisis que marcará el futuro del planeta, México simpatiza con la causa de Vladimir Putin.
Así lo dicen en corto y ante los micrófonos congresistas influyentes como Sam Melendez que adelantan que México tendrá que asumir las consecuencias de su indefinición.
Algo similar se dice en el Departamento de Estado. La versión es que el secretario Blinken ha pedido explicaciones al embajador Ken Salazar que consiguió, en el primer día de la invasión, que México, después de un arranque titubeante, se manifestara en contra del operativo.
Ayer circuló un manifiesto firmado por supuestos por jóvenes morenistas del Edomex que se declaran abiertamente en favor de Rusia, lo que sin duda abona a las suspicacias norteamericanas. | Se destaca en “Pepe Grillo” de La Crónica.