* El colombiano descarta algún problema con Santiago Solari

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Nicolás Benedetti fue claro y contundente al asegurar que su paso por el América no fue un fracaso, a pesar de que no logró mostrar su mejor versión.

En enero del 2019 fue anunciado como refuerzo de las Águilas. Sin embargo, nunca pudo confirmarse como un jugador indiscutible en el equipo de Coapa, quedando marcada su estancia por las lesiones.

«La verdad es que no fue un fracaso. Llegué a una gran institución, que me abrió las puertas, al principio logré demostrar mi talento y después tuve muchas lesiones que me mermaron y perdí continuidad, pero yo nunca lo llamaría fracaso porque aprendí muchas cosas como profesional, como persona y eso es lo que importa. Obviamente que me queda un sentimiento negativo de que no pude demostrar todo mi talento, pero nunca lo llamaría fracaso», confesó Benedetti en entrevista con ESPN.

En los dos años que formó parte de los azulcremas, el colombiano tuvo actividad en 39 partidos, anotando 6 goles y dando 3 asistencias. Ganó la Copa MX y el Campeón de Campeones en el 2019.

Para el Clausura 2022, el volante dejó al América para convertirse en jugador del Mazatlán FC, equipo con el que espera tener mejores resultados y más minutos de juego.

«Quiero dejar atrás esos años en los que no tuve mucha continuidad, años en los que no podía jugar por muchos motivos. Hoy se me está brindando esta oportunidad, aunque tampoco aquí nadie me va a regalar nada y sé que tengo que trabajar al máximo para conseguir esos minutos de juego, pero creo que si los consigo y si soy constante verán una versión de Nicolás Benedetti mucho más adaptada al fútbol mexicano, una versión mucho más precisa y esto me ayudará a dar ese salto que quiero hacer hacia la selección colombiana.

«El profe Rueda, que es el actual técnico, ha demostrado que le gusta llamar jugadores que estén en forma y esa es mi meta, la de poder estar en forma y poder competir por un puesto», agregó.

Benedetti confesó que su relación con Santiago Solari terminó de buena manera.

«Todo terminó muy bien. Hablé con el míster Solari y le di las gracias porque desde afuera se ve que todo está mal porque uno no juega, pero no todo es así. Uno como jugador trata de dar el máximo con todas las personas que se le cruzan en el camino y Solari no fue la excepción, traté siempre de estar a las órdenes, dando mi 100 por ciento en cada entrenamiento que esa situación para mí no es negociable y obviamente el técnico toma sus propias decisiones, pero aprendí mucho de Solari.

«Les estaré eternamente agradecido, al igual que con todos los cuerpos técnicos por los que he pasado. Ellos también pusieron en mí ese granito de arena que me va a servir para el futuro, así que todo bien con él», finalizó.