Después de todo cual es la prisa por retornar a las aulas.

Prácticamente el ciclo escolar está perdido. O al menos en eso coinciden cientos, quizá, miles de docentes.

Lo que sobra decir es que la seguridad de los menores, por citar un solo ejemplo, es lo primero.

Recordemos que le epidemia no ha terminado, esto no tiene para cuando.

Lo ideal es preparar más a conciencia las condiciones sanitarias para tan anhelado retorno e iniciar el próximo ciclo con muchos bríos. Tiempo sí hay para ello.

La sanitización de los salones, de los baños, de los patios y de todas las áreas es fundamental, lo urgente es una correcta planeación y coordinación en los trabajos de higiene.

De igual forma seria formidable que el número de alumnos, en cada grupo, sea pequeño, quince a lo máximo, sin dejar de lado el uso de cubre bocas, ni el gel antibacterial. Y de ser posible tener, lo mayormente posible, ventilada el aula.

Hasta donde sabemos, en este regreso, el aprendizaje será mixto, es decir que continuará el programa Aprende en Casa y solo algunos alumnos concurrirán a los salones, además la asistencia será escalonada, pues no todos los niños de educación básica transitarán al mismo tiempo a las escuelas. No habrá ceremonias ni eventos y se mantendrá sana distancia entre alumnos y maestros.

De continuar con las prisas el riesgo de llevarnos a otro confinamiento es alto. Eso ni dudarlo. Y la vida de los pequeños es primero.

Para las autoridades de salud, en voz de su titular, Jorge Alcocer, no hay evidencia internacional de que las escuelas sean focos de contagio de Covid-19, pero eso no quiere decir que sean seguras, las providencias hay que tomarlas a iniciativa propia.

Por lo mientras en Campeche a partir de este lunes los menores ya retornan a los salones, de nueva cuenta, aunque no como antes, tal vez podrán jugar con sus amigos, correr, divertirse y contar sus historias en vivo. Convivir, eso que tanta falta les hace.

En dicha entidad las clases se retomarán luego de que los maestros en su totalidad ya fueron vacunados contra Covid-19.

Otras de las providencias que se tomaron en cuanta es consumar la vacunación de adultos mayores y personal docente. Se instalo el comité de participación escolar en salud y, la más importante, y se llevó a cabo una limpieza a conciencia en todas las escuelas, son otras de las medidas adoptadas.

Por lo mientras Delfina Gómez, titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), acentuó que el regreso a clases presenciales no es obligatorio.

El llamado que hace la mexiquense a los padres y madres de familia, es a realizar un mayor esfuerzo para cumplir con un retorno seguro.

Serán los padres de familia los que tomen la determinación y, para ello, existe una carta compromiso que deberán firmar los tutores en donde autorizarán que los menores hijos puedan asistir a las aulas.

La epidemia no ha terminado. Debemos estar conscientes y tomar la mejor decisión que creemos.

Lo cierto es que las clases presenciales para este y el próximo ciclo deben ser voluntarias, decidiendo cada familia qué es lo mejor para sus hijos y, por supuesto, acatando la responsabilidad de su elección.

Ahora también hay que escuchar el sentir de los docentes.

Ellos también tienen la palabra. Porque, así como a los menores, no se debe poner en riesgo a un maestro o a una familia, reiteramos, no se debe tomar ninguna decisión que ponga en conflicto a los profesores.

Suerte.