Hace ya una semana de que uno de los hombres más importantes de su gabinete está pasando por una dura acusación en Estados Unidos, y el expresidente Enrique Peña Nieto no ha puesto ni un mensaje en Twitter en referencia al caso del general Salvador Cienfuegos. Al militar que durante los seis años de su administración se encargó de la Defensa Nacional no debería sorprenderle el mutismo de Peña, pues nos hacen ver que cuando el mundo se le vino encima a su amigo y mano derecha Luis Videgaray, por las acusaciones que hizo Emilio Lozoya, don Enrique se quedó calladito como momia. Nos dicen que es evidente que el expresidente está dejando a su equipo rascarse con sus propias uñas, y de paso, tratando de evitar que por darles la mano se lo vayan a jalar al hoyo. | Se puede leer en “Bajo Reserva” de El Universal.