¿No se suponía que el exdirector de Pemex Emilio Lozoya estaba flojito y cooperando con la justicia mexicana? Nos hacen ver que con una mano don Emilio negocia con la Fiscalía General de la República (FGR) para obtener beneficios durante su proceso penal a cambio de información, y con la otra  pelea con la misma dependencia, pues no quiere que el gobierno federal se quede con su lujosa mansión en Lomas de Bezares. Primero impugnó el aseguramiento de la casa decretado en mayo de 2019 y logró liberarla así como el menaje de la misma. Sin embargo, la sentencia de ese amparo con el que liberó la mansión tenía jiribilla, que fue aprovechada por la FGR para asegurar nuevamente el inmueble, pero sin el menaje de casa. Y ahora de nueva cuenta Lozoya emprendió un litigio para recuperar la casa que fue adquirida por 34 millones de pesos dinero que, según la fiscalía, proviene de un soborno que el exfuncionario presuntamente recibió de Alonso Ancira para la compraventa irregular de la planta de Agronitrogenados.   |   Se puede leer en “Bajo Reserva” de El Universal.