La noticia es que anoche avanzaba la extinción de fideicomisos en el Senado, en condiciones que en el actual sexenio no se habían visto: sesión en una sede alterna, custodiada por policías antimotines, en medio de reclamos de grupos que se verán afectados con la desaparición de los mismos —fundamentalmente científicos y familiares de desaparecidos—, con señalamientos por la participación de un legislador que recién tuvo Covid-19. También con una configuración de fuerzas distinta, pues el PT, convertido en fiel de la balanza, se separó de los propósitos de Morena, de quien fuera de la mano en prácticamente todas las votaciones hasta ahora, para ir en contra de la desaparición de 35. El propio presidente de la Jucopo, Ricardo Monreal, la tarde de ayer anticipaba que iba a una votación en la que la propuesta de desaparición podría aún cambiar. Por todo esto, esta reforma legislativa, podría marcar un antes y un después. Al tiempo.   |   Se lee en “Rozones” de La Razón.