El Barcelona se metió en cuartos de final de Champions League, donde enfrentará al Bayern Munich, por la excelente actuación deLeo Messi. El argentino, como en tantas otras ocasiones a lo largo de su carrera, fue la pieza clave que desequilibró el partido ante el Napoli. Bastaron 20 minutos portentosos del crack para doblegar a un equipo italiano que no supo cómo frenarle. En ese espacio de tiempo provocó un penalti, marcó un gol y le anularon otro que fue una auténtica obra de arte.

Su buen estado de forma es el principal argumento del Barcelona. Si quitamos a Leo poco más queda. Y no es algo nuevo. En los últimos años el argentino ha tapado con sus goles muchas de las carencias que tiene el Barça. Y el problema es que cuando Leo no está, al resto del equipo le cuesta más de la cuenta dar un paso adelante.

Si nos atenemos al partido del sábado, las estadísticas son elocuentes. La posesión, algo que era innegociable para Setién cuando llegó a Can Barça, fue de los italianos con un 53%. El Napoli también disparó más a puerta que el equipo azulgrana y en la segunda mitad dominó al cuadro local. Es evidente que el factor que desequilibró el partido fue Messi.

Con estas sensaciones viajará el próximo jueves la expedición azulgrana rumbo a Lisboa. En el Barcelona todos saben que esta Champions será lo que diga Leo. Si el argentino está a un buen nivel, habrá alguna opción de conseguir el título. El problema es que Messi no siempre puede resolverlo todo. No se le puede pedir que siempre sea el salvador del equipo. Hay otros jugadores que deberán dar un paso adelante como es el caso de Griezmann, muy solidario en el trabajo, pero poco participativo en el juego de ataque. También Luis Suárez que tiene una cuenta pendiente con el gol en Champions lejos del Camp Nou.

 

Messi estará frente al Bayern a pesar de la fuerte patada que recibió de Koulibaly y que le tuvo tendido en el césped unos cuantos minutos. El futbolista solamente tiene un golpe. De hecho, no hubo necesidad de hacerle más pruebas médicas. El jugador guardará reposo hasta que remita el dolor, pero no hay ninguna duda de que podrá estar en el choque de cuartos.

Enfrente tendrá al Bayern. Un equipo que se le da bien. Dos veces lo eliminó siendo protagonistas con dos goles en cada eliminatoria. Y cuando cayó, fue porque jugó el partido de ida lesionado.