La alcaldesa está empeñada en heredarle el trono a su hija.

Sin importarle pasar sobre lo que sea y encima de quien sea, ella le habrá de cumplir el capricho a su hija de cuando menos hacerla candidata abanderada por el Revolucionario Institucional.

Con la del pasado domingo ya son, cuando menos, dos ocasiones en que, en plena pandemia, y sin las mínimas medidas sanitarias, organiza festejos utilizando a la población xiqueña.

La más reciente fue tomando como pretexto la celebración del Dia de la Madre en la congregación de San Marcos de León.

Ignorando por completo la sana distancia, sin aplicarle a los asistentes gel antibacterial mucho menos la instalación de un filtro sanitario la alcaldesa llevó a cabo la entrega de regalos a las mujeres asistentes.

Cuando menos fueron cien las personas allí reunidas todas sin cubrebocas, sin tomar en cuenta las medidas sanitarias emitidas por las autoridades de Salud, por lo que el riesgo fue mayúsculo al estar presentes también menores de edad.

La fiesta estuvo en grande, por más de dos horas las asistentes se divirtieron, pero también se expusieron en demasía al no tomar en cuenta las medidas higiénicas.

Como se podrá observar de nueva cuenta Gloria Galván Orduña, desatendiendo las medidas de prevención implementadas por las autoridades federales y locales debido a la pandemia, realiza  otro festejo más exponiendo a la población a un riesgo mayor.

Tal parece que a la alcaldesa le valió madre el que nuestra entidad se ubique en cuarto lugar con el mayor número de casos de Covid-19 con 1,666, detrás de Ciudad de México, Estado de México y Tabasco.

Recordemos que Galván Orduña se ha caracterizado por la tibieza con que trabaja, la mediocridad con que se desenvuelve y la indiferencia con que atiende a la población.

Los cercanos a ella señalan que la doctora, hacia el interior del palacio municipal, solo es una figura decorativa, una marioneta.

Lo cierto es que el daño que le está haciendo Galván Orduña a este pujante municipio no tiene precedente, no hay avance, los prestadores de servicios turísticos no reciben ningún apoyo de la autoridad municipal, la obra pública está estancada, los servicios públicos básicos son de pésima calidad y l el manejo de los dineros públicos, se dice, no son de fiar.

Por favor, ya basta de tanto valemadrismo.

EN ACTOPAN

En este municipio los ánimos están al rojo vivo.

La población no habrá de tolerar más abusos, demandan la salida inmediata del alcalde interino Eduardo Carranza Barradas.

En las congregaciones el malestar es generalizado, repudian a este personaje.

Por lo anterior, no dudaron ni un minuto en ratificar la denuncia en contra del alcalde interino por presunto abuso de autoridad, usurpación de funciones y los quebrantamientos que se conciban al permanecer en el cargo de manera ilegal.

Los actopeños merecen, y exigen, respeto.

Claro que sí.