Vaya desde aquí nuestro más humilde reconocimiento a los profesionales de la medicina, especialmente a los de nuestro país que, en estos momentos tan difíciles, cumpliendo con su labor, o apostolado, doblemente arriesgan su tranquilidad y la de sus familias.
A todos aquellos que de una u otra forma hacen su día a día en un nosocomio, en una sala de sanatorio, en una recepción hospitalaria o bien en un consultorio.
Mis respetos u admiración a todos ellos, ya que aun cuando el gobierno federal, y en consecuencia los estatales, los ha abandonado, los ha dejado solos, ellos no se doblan y cumplen al pie de la letra con su cometido, con su juramento hipocrático.
Las carencias que vienen padeciendo, mismas que en repetidas ocasiones se las han hecho saber al dueño de “La Chingada”, ya hizo estragos, ha colapsado el Gobierno Federal.
Por lo anterior no solo en la capital del país sino en diversos estados, estos héroes anónimos, cuando menos han tenido que salir a manifestarse demandando cuando menos los insumos necesarios para atender la pandemia, y otros, con sus propios recursos han adquirido parte del equipo esencial para estos casos.
Sobra decir que las carencias de recursos y materiales, así como de equipo de protección para quienes librarán la batalla por el pueblo, es toda una realidad, nadie desconoce que estos valientes personajes trabajan con infinidad de limitantes gracias al valemadrismo del señor López, de ese esquizofrénico personaje que más que titular del Ejecutivo Federal ha resultado ser un verdadero bufón, un arlequín al cual ya se dio cuenta que le llego al agua a las criadillas y ha puesto en serio riesgo a su “pueblo sabio”.
Fue tanto el valemadrismo de las autoridades sanitarias federales que se pasaron por el Arco del Triunfo las sugerencias emitidas para estos casos por la Organización Mundial de la Salud, es más, para acabar pronto, varios gobernadores y alcaldes tomaron sus providencias, mandándolo por un tubo, por no decir a su rancho.
Lo más lamentable es que el Gobierno Federal no ha estado haciendo las pruebas necesarias y, por lógica, los mandatarios estatales han permanecido con las manos atadas.
Reiteramos, en estos momentos de la pandemia, los grandes héroes anónimos son todos los trabajadores del sector salud en el planeta, y más los de México, sí, ellos gracias a lo vale madre del tal señor López.
TRES GOBERNADORES DAN POSITIVO
El de Querétaro, Francisco Domínguez Servién, el de Hidalgo, Omar Fayad Meneses, el de Tabasco, Adán Augusto López, dieron positivo en la prueba del COVID-19.
La cifra sin lugar a dudas va a aumentar pues no olvidemos que el mandatario hidalguense estuvo presente en la conferencia mañanera que protagoniza el señor López, escasos 10 días antes de dar positivo al coronavirus.
En dicho encuentro con los medios de comunicación Fayad Meneses intercambio diálogos con el secretario de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú; con el titular de la Defensa Nacional, Luis Crecencio Sandoval; con el de Marina, José Rafael Ojeda Durán; el de Desarrollo Urbano, Román Meyer, y con el general encargado del Aeropuerto de Santa Lucía Ricardo Vallejo Suárez.
